Uno de los problemas que se asocian más comúnmente al consumo de refrescos en México y el mundo es que propician el aumento de peso debido a las calorías vacías que contienen, pero, sobre todo al alto consumo por parte de un gran sector de la sociedad haciendo de esto un problema de salud pública.
¿Qué opciones saludables de bebidas pueden sustituir al refresco en las comidas?
Una alternativa a los refrescos es incorporar aguas de sabor o “aguas frescas” pero tienen el inconveniente de ser preparadas con azúcar por lo que una opción saludable sería tomarlas con muy poca a nada de ella. Algunos ejemplos son:
Para mejorar el sabor de estas aguas de sabor se puede utilizar un poco de endulzante sin calorías.
¿Se puede tomar solo un poco de refresco de vez en cuando?
Para hacer una recomendación práctica, lo mejor sería evitarlo. Según la información del ISNP, en México se consume 163 litros de refresco por año por persona, pero, tomando en cuenta que muchas personas no lo consumen, esto significa que las que sí lo hacen, toman mucho más que la media mencionada.
¿Tiene otros efectos nocivos sobre la salud?
Según la Secretaría de Salud Jalisco en su página oficial, nos comenta que el refresco puede causar lo siguiente:
Para la mayoría de las personas, tomar una lata de refresco muy de vez en cuando no le traerá consecuencias serias, pero, debido a la situación actual de salud lo más recomendables es desalentar su consumo y preferir el agua simple como principal fuente de hidratación.