De acuerdo con la UNICEF en la publicación “Sobrepeso y obesidad en niños, niñas y adolescentes”, México presenta un problema de sobrepeso y obesidad en niños menores de 5 años, donde menciona que al menos 1 de cada 20 niños de esta edad tiene obesidad.

¿Por qué surge la obesidad infantil?

La Secretaría de Salud en la publicación "Obesidad infantil: Nuestra nueva pandemia" (2021) menciona que la obesidad principalmente se relaciona con un aspecto genético, pero actualmente el estilo de vida ha tomado un papel importante pues la ingesta de alimentos de alta densidad calórica, bebidas azucaradas y la falta de activación física recae directamente a estas enfermedades; además de la elevada disponibilidad de comida chatarra, alimentos procesados y con azúcares adicionales en las escuelas del país.

¿Cómo se puede prevenir o corregir la obesidad infantil?

Inculcando y promoviendo la buena alimentación, ya que se ha visto que existe un bajo consumo de frutas, verduras, huevo, leche, pescado, leguminosas y carne.

Por otro lado, señala que es importante el cuidado en el embarazo y la importancia de la lactancia materna exclusiva; así como evaluar y mejorar el servicio de alimentación escolar e impulsar la activación física para reducir el sedentarismo en niñas y niños.

¿Pueden los probióticos beneficiar en la obesidad infantil?

En 2017, se realizó un estudio con bacterias probióticas, llamado “Los efectos de la cepa Lactobacillus casei sobre la obesidad infantil: un estudio piloto” por Nagata S y colaboradores, en la investigación que duro un año, se intervino a niños obesos con 6 meses de dieta y ejercicio, después se dividió el grupo para tener un grupo control y otro grupo que Lactobacillus casei cepa Shirota (LcS) por otros 6 meses.

En la conclusión y resultados del estudio fue que el LcS contribuyó a la pérdida de peso y al mismo tiempo mejoró el metabolismo de los lípidos en niños obesos mediante un aumento significativo en el número de Bifidobacterium en heces y la concentración de ácido acético.

Es importante que los niños y niñas tengan un buen ejemplo de vida en todos los aspectos del ser humano, la alimentación es uno de ellos, se necesita procurar alimentos saludables, regular los productos que pueden aumentar su ingesta calórica y fomentar el juego y actividad física diariamente.