La microbiota intestinal alberga un complejo ecosistema lleno de miles de millones de microorganismos a lo largo del tracto digestivo, encontrar el punto de equilibrio entre los microorganismos y el hospedador proporcionará beneficios extras a la salud, por ejemplo,  fortalecimiento del sistema inmunológico, correcto crecimiento corporal y apoyo en función nutricional, entre muchos más.

La microbiota intestinal juega un papel fundamental en la salud y en la enfermedad, Julia Álvarez en su artículo “Microbiota intestinal y salud” 2021, menciona algunas enfermedades crónicas no transmisibles (atopias, síndrome metabólico, enfermedades inflamatorias, cáncer y algunos trastornos de conducta) se asocian a la disbiosis, es decir pérdida de riqueza de especies en la microbiota intestinal. 

¿Qué es un metabolito?

El Dr. Marcelo Osvaldo Lucentini en su presentación “Introducción al metabolismo” 2019, lo menciona como un compuesto químico intermediario en las reacciones enzimáticas del metabolismo.

Como dato importante a la sustancia de partida o inicial se le conoce como sustrato, a las sustancias intermedias se le llama metabolito intermedio y a la sustancia final se le suele conocer como producto o metabolito final.

¿Puede haber varias rutas metabólicas?

Sí, a la sucesión de reacciones metabólicas que transforman una sustancia inicial o sustrato en otra se le conoce como vía o ruta metabólica.

La gran mayoría de las rutas metabólicas se encuentra interconectadas, por lo que un metabolito intermedio o final, puede ser el sustrato en otra vía metabólica.

Por ejemplo, un hidrato de carbono sería el sustrato o sustancia inicial, posterior a todo el proceso químico el resultado final o metabolito final sería la glucosa.  

¿Puede brindar efectos benéficos a la salud intestinal?

Claro que sí, la Asociación Mexicana de Gastroenterología en su publicación “Fibra dietaría y microbiota” 2021, menciona algunas estrategias que pueden modular la microbiota intestinal como lo es el consumo de probióticos y prebióticos.

En el mismo artículo, también menciona que el consumo de fibra dietaría metabolizable por la misma microbiota intestinal, genera metabolitos como los ácidos grasos de cadena corta (AGCC), como lo son el acetato, propionato y butirato, con funciones locales y sistémicas.

Conclusión

Se ha demostrado que el consumo de fibra soluble como la pectina e inulina, y de fibra insoluble como hemicelulosa, puede incrementar la abundancia de bacterias productoras de AGCC, ayudando a mejorar y equilibrar la microbiota intestinal y la salud en general.

La disbiosis se ha asociado a una serie de trastornos gastrointestinales e inmunes afectando la calidad de vida de las personas, la alimentación, actividad física, sobrepeso, consumo de medicamentos, alcohol, tabaco, entre otros son factores que van a estar implicados en el desequilibrio de la microbiota intestinal.